La Comuna de San Martín hace de nexo entre más de 30 escuelas y los alumnos que han quedado aislados por falta de conectividad.
“La muni te acerca las tareas” es un programa de la Coordinación de Educación de la comuna de San Martín que, en plena pandemia, lleva asistidos con material escolar a más de 500 alumnos de 33 escuelas de todo el departamento.
El objetivo del programa es acercar el material escolar a aquellos alumnos que, en medio de la pandemia y por problemas de conectividad, no han vuelto a tener contacto con su escuela. La comuna imprime las tareas y sirve de enlace.
“Intentamos vincular a los alumnos con sus tareas escolares. Imprimimos, llevamos a las casas y retiramos el material educativo una vez que las tareas están resueltas”, comentó Jorge Fontana, coordinador de Educación, del Municipio.
Para ello, los agentes municipales del área de Educación sacan fotocopias de los materiales educativos y las tareas, y las reparten en los domicilios particulares de los alumnos. “Esta tarea se vuelve titánica, si tenemos en cuenta que son más de 500 alumnos asistidos en la pandemia, por sólo cinco personas que forman parte del equipo”, detalló Fontana.
El funcionario explicó que “hemos incluido a 33 escuelas de todos los distritos del departamento. Un 50% de los alumnos asistidos pertenecen a Centros de Educación Básica para Jóvenes y Adultos (CEBJA) y Centros Educativos de Nivel Secundario (CENS) que fueron los primeros en sumarse al programa”.
El resto, un 30% pertenece a educación técnica y el 20% restante, son de nivel inicial y primaria. “Trabajamos con recursos propios, las impresoras y fotocopiadoras funcionan durante todo el día para llegar a asistir a tantos alumnos”.
Respecto al relevamiento geográfico del programa, Fontana expresó: “Estamos presentes en todo el departamento, pero hemos puesto mayor atención en los distritos de Tres Porteñas, El Divisadero y Nueva California. En estos distritos ya vamos por la tercera entrega de material. El distrito que más asistidos tiene por el programa es Palmira, con aproximadamente 160 alumnos”.
En un principio el programa funcionaba llevando el material fotocopiado a los domicilios y se los retiraba cuando estaban completos, llevándolos a las escuelas. Con el correr del tiempo y a medida que el número de alumnos fue creciendo, se les solicitó a las familias de los chicos asistidos que fueran ellos los que llevaran las tareas realizadas a las escuelas, para su posterior corrección.
Jorge Fontana concluyó: “Las distancias y la situación económica reinante hace que muchos papás no tengan acceso a internet, ni a teléfonos o computadoras, y mucho menos a impresoras, y se muestran muy agradecidos cuando ven llegar a nuestras agentes, que trabajan a veces horas de más, para acercarle las tareas a los alumnos”.
